Seguro
que alguna vez has visto la foto de una cama infantil en un catálogo
o revista de decoración, y siempre lo ves tan perfecto que parece el
aposento de un pequeño príncipe o princesa. Encima te das cuenta
que le acomoda cualquier tipo de vestimenta que se le acople a la
foto.
Para
hacer una cama perfectamente siempre como mínimo hacer falta unas
sábanas, con una funda nórdica con un buen relleno, un edredón,
una colcha con varias mantas debajo o alguna de las numerosas
opciones que podemos observar en cualquier blog de decoración
infantil.
Cuando un
interiorista se plantea el ambiente que debe tener la cama del niño
para integrarse con el resto de la composición, siempre se pregunta
como prefiere la madre vestir el lecho. Hay quien prefiere un edredón
que cubra totalmente el pie, otras mamás son más informales y se
decantan por un nórdico, etc.. En fin aunque parezca una decisión
baladí, el poseer una cama perfectamente ambientado para nuestro
hijo es algo vital y que conlleva meditar algunos aspectos para que
acabe como una de esas perfectas fotos que hemos comentado al
principio.
La parte
más importante y visible es la cubierta, donde se puede elegir:
- Edredón
Es una
cobertura de la cama que ganó popularidad durante finales del siglo
XX. Fue diseñado para reducir la complejidad de hacer la cama, al
servir como una única cubierta que sustituye a las mantas y colchas.
El edredón en sí está hecho de plumas hacia abajo y encaja en una
cubierta que se puede lavarse con regularidad, como las almohadas.
- Colcha
Sería la
típica cobertura de toda la vida que no tiene ningún tipo de
relleno y que son mucho más finas. Lo habitual es usarse en
primavera cuando hace menos frío, ya que sino haría falta incluir
alguna manta adicional para conseguir que el niño duerma bien
caliente.
- Funda nórdica
Sería
otro tipo de cubierta pero que tiene una abertura total para incluir
dentro el relleno con el gramaje deseado. Cuanto más pesado,
evidentemente más calentito. La otra diferencia respecto a los
edredones para niños es que no llegan a cubrir todo el pies de la
cama, sino que quedan colgando. La ventaja es que es muy fácil de
hacer luego la cama, aunque da un cierto aspecto informal al lecho.
- Saco nórdico
Es una
opción que ha ganado enteros en estos últimos años. Ya que con un
saco nordico con cremallera consigues
que la funda nordica se acople a la sábana. De forma que la mamá
puede tapar al niño abrochando la cremallera y así no se destapa
nunca. Eso sí estos saquitos nórdicos llevan un relleno parecido al
de los edredones.
- Almohadas
Evidentemente
toda cama infantil, juvenil o de adulot se acompaña de una almohada
bien cómoda para apoyar la cabeza al dormir.
- Cojines
Aparte
también se pueden encontrar cojines con función decorativa y que no
se deben emplear al momento de dormir, aquí podemos encontrarlo de
muchas formas distintas: cuadrados, rectangulares, de triángulo,
etc...
- Manta
Están
diseñadas para proporcionar una capa adicional de calor, lo habitual
es que no se vean ya que irían debajo de una colcha. Pero en las
últimas tendencias de decoración para habitaciones de niños se
están colocando a los pies de la cama.
Mucha
gente va a considerar algunos de estos elementos innecesarios y
caros. Pero aconsejo siempre valorar todas las alternativas antes de
elegir la cubierta de la cama de nuestros niños.